La final entre River y Boca no se pudo jugar según lo pautado gracias a dos factores claves: el salvajismo de unos pocos y los errores en términos de seguridad para controlar a la «gente» que no se sabe comportar.
Incidentes que comenzaron con el ataque al bus de Boca Juniors cuando estaba por ingresar en el Monumental y que se extendieron a las inmediaciones del estadio durante horas. Encuentros violentos absurdos entre desadaptados y la policía de la ciudad de Buenos Aires.
Pero si los botellazos y agresiones al bus de Boca son una verguenza, peor lo es el video que se hizo viral donde se observa como una mujer esconde bengalas dentro de la ropa de una pequeña niña para poderlas ingresar al estadio.