Que los empleados necesitan siempre un jefe que vigile su accionar en la oficina no es una falacia. Muchos se quejan que no necesitan a un jefe que les respire en la nuca o que pase siempre por su puesto de trabajo para revisar que están haciendo.
Hay gente que no cree a otros capaces de comportarse peor que un grupo de niños en un aula de clases en la escuela primaria.
Pero si, en las oficinas también se cumple el dicho que «cuando el gato no está los ratones hacen fiesta»
Buen video para generar ideas un viernes en la oficina.