Venezuela no pudo ante Brasil a pesar de manejar la pelota y los tiempos del partido. Un error defensivo condenó el resultado que paró en seco el buen arranque vinotinto.
Brasil no muestra lo que normalmente se espera en esta categoría. Un equipo impreciso, con intención de salir jugando, pero con falta de recursos para hacerlo.
La Vinotinto comenzó presionando y con las líneas adelantadas, pero a medida que los minutos fueron pasando, Dudamel decidió retrasarlas para administrar el partido.
Esto le ofreció más espacio a Brasil que empezó a manejar más la pelota mientras Venezuela salía al contragolpe con Hurtado muy solo en punta.
Eso si, de vez en cuando y aprovechando esas dudas en el fondo de Brasil para salir, La Vinotinto presionaba desde el área buscando y generando errores en la canarinha.
Sin embargo transcurrió la primera parte sin que ninguno de los dos arqueros tuviera que esforzarse. El juega era movido, de idas y venidas, abierto pero sin que ninguno concretara sus opciones.
La segunda parte abrió un poco más las cosas. La Vinotinto buscó un poco más y tuvo varias que no aprovechó, y tras un penalti no pitado a favor de Venezuela (que raro), llegó el contragolpe y el primer gol de Brasil.
Rodrygo, el fichaje millonario a futuro del Real Madrid, recibió un pase en el área solo después de un desafortunado despeje defensivo. No lo pensó dos veces y de remate fuerte y cruzado batió a Olses que intentaba achicar.
Con el gol brasil se metió atrás a esperar y contragolpear si se generaba el espacio. Y así fue. En uno de sus ataques Rodrygo recibió dentro del área y con un muy buen movimiento clavó una daga inatrapable.
Con el partido sentenciado La Vinotinto nunca abandonó. Intentó y buscó, insistió y chocó. Pierna fuerte, ganas, buen toque, pero poco acierto, falta de concreción e incapacidad de abrir a una defensa que se plantó muy bien en bloque frente al área.
Sin embargo en el minuto 90 Samuel Sosa, y como no, aprovechó un tiro libre. Coló la pelota en una zona de la barrera y convirtió su segundo gol del torneo, confirmando una vez más su calidad y dándole drama a los 5 minutos de descuento.
La Vinotinto se queda con las ganas de conseguir ganarle a la canarinha por primera vez en su historia, con una buena presentación y disputando cada centímetro de campo y segundo del partido.
Esta Vinotinto planta cara a cualquier rival en este torneo y contra Bolivia, en su último partido, debería terminar de certificar su pase de ronda con victoria.